Comercio e inversión

La República Dominicana cuenta con una población de 10.5 millones de habitantes y un PIB de 67,5 mil millones de dólares. El país a conocido, en los últimos años, un crecimiento dinámico con un promedio de +5.9% anual, muy superior al de América Latina y del Caribe (+4.1%).

La República Dominicana a adoptado un modelo de crecimiento abierto, llevando una política orientada hacia las zonas francas de bienes y servicios, con la creación de incentivos para el turismo y la creación de zonas francas.

La República Dominicana es parte del Cariforum y beneficia de ventajas comerciales con el Acuerdo de Asociación Económica con la Unión Europea (EPA). También es signataria de tratados de libre comercio con los Estados Unidos y América Central (DR-CAFTA). Forma parte del exclusivo grupo de país signatarios de tratados tanto con la Unión Europea y los estados Unidos. En total, la República Dominicana puede ser potencialmente suplidora a los 900 millones de consumidores de estos países.

Según datos de la CEPAL y del Banco Central de la República Dominicana, la economía dominicana ha conocido en 2015 el mayor crecimiento de América Latina y del Caribe (+7%) gracias principalmente a la construcción (+18.2%), el comercio (+9.1%), la intermediación financiera ((+9.2%), la educación (+ 8.6%) el transporte (+6.4%), el turismo (+6.3%), la salud (+5.8%) y la industria (+5.5%). En el periodo 2010-2015, el crecimiento anual promedio ha sido de +5.5%.

Los ingresos procedentes del turismo han aumentado (+9.2%) así como las remesas (+6.8%). La Inversión Extranjera Directa continua de aumentar (+3.8%; representando 3.4% del PIB) principalmente en los sectores de telecomunicaciones, comercio, servicios financieros y turismo. Las reservas de divisas han alcanzado a finales de 2015 un nivel histórico (5.2 mil millones de dólares).

La nota de riesgo soberano por las diferentes instituciones internacionales han sido elevadas por Standard & Poors (de B+ a BB- con perspectiva estable) y por Fitch Ratings (B+ revisando la perspectiva de estable a positiva).

La Estrategia Nacional de Desarrollo (2010-2030) busca nuevas fuentes de crecimiento a través de la diversificación de la oferta turística, de socios comerciales, del mejoramiento de la competitividad y la educación y del reforzamiento del valor agregado a los sectores agrícolas e industriales.